Curiosidades de la película Luca

Algunos datos sobre la nueva película de Disney · Pixar Luca, la cual llega a Disney+ el 18 de junio. Luca es una historia divertida y conmovedora sobre la amistad, la salida de la zona de confort y dos monstruos marinos adolescentes que viven un verano que les cambia la vida. “Esta película trata de las amistades que nos cambian”, dice el director Enrico Casarosa. “Es un homenaje a los veranos de nuestra juventud, esos años en los que te encuentras a ti mismo”.


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La historia, ambientada entre finales de los años 50 y principios de los 60, capta la magia y la aventura del verano. La ambientación en la costa italiana fue creada con un impresionante estilo pictórico que Casarosa defendió, y que tiene su origen en su infancia. “Tuve la suerte de crecer en Génova, una ciudad portuaria de la Riviera italiana”, dice. “Es una costa muy específica porque es muy escarpada: las montañas se elevan desde el océano. Las ciudades se me han quedado grabadas, son muy pintorescas. Siempre los imaginé como pequeños monstruos que salen del agua”.

Inspirándose en las criaturas de los mapas antiguos que se remontan al Renacimiento, así como en las ilustraciones de ciencia ficción de los peces de la región y en los dragones y serpientes japoneses, los artistas crearon monstruos marinos que fueran creíbles, atractivos y, lo que es más importante, expresivos, porque la historia gira en torno a la floreciente amistad entre Luca y Alberto. “Su amistad saca lo mejor de Luca y le da la confianza para desplegar sus alas y asumir más riesgos”, dice la productora ejecutiva Kiri Hart. “Es una historia absolutamente encantadora y conmovedora sobre la amistad y sobre cómo nuestros amigos pueden desbloquear ciertas partes de nosotros, dándonos la oportunidad de descubrir algo sobre nosotros mismos”.

EL ARTE IMITA A LA VIDA


Los personajes principales de la animación, Lucas y Alberto, están basados en el propio director (Enrico Casarosa) y en su amigo de la infancia, también llamado Alberto, al que conoció a los 12 años. Además, el paisaje costero de Italia también procede de una inspiración infantil del cineasta: creció en Génova, una ciudad portuaria de la Riviera italiana, donde se desarrolla la película.

Y HABLANDO DE INSPIRACIÓN...


Casarosa se inspiró, en parte, en las películas italianas de los años 50, como La Strada y La princesa que quería vivir (Roman Holiday). Los carteles creados por Pixar para ambos aparecen en la película. Otras fuentes de inspiración son los mitos, las leyendas y las tradiciones italianas, desde los cuentos de dragones hasta la historia de un pulpo que hace sonar las campanas que salvaron a un pueblo de un grupo de piratas.

¡ENCANTADOR!


Para producir la animación, los cineastas viajaron a Italia para investigar la cultura local, la arquitectura y el ambiente general de la película. La comida fue un punto fuerte de su investigación. Casarosa, originario de Italia, incluso invitó a los miembros del equipo a cenar en casa de sus padres en Génova.

AMBIENTE REALISTA


Todas las voces infantiles de fondo de la película fueron grabadas por niños locales en Italia.

ECHA UN VISTAZO


Cuando Luca y Giulia miran por el telescopio, ella menciona que el objeto pertenece al “Viejo Bernardi”. Es un homenaje al gran amor que Chris Bernardi, supervisor del set, tiene por la astronomía y la astrofotografía. Tanto es así que Bernardi posee nada menos que seis telescopios.

FUERA DE CONTROL


Hay 221 y 223 controles individuales en las bocas de Luca y Alberto, respectivamente, para ayudar a los animadores a crear las expresiones bucales redondeadas que utilizan a lo largo de la película.

VISUALES DE LOS PERSONAJES


Los artistas visuales de Luca dieron al personaje de Giulia un aspecto diferente, adoptando un lenguaje de formas triangulares, especialmente en el pelo y los pantalones. Otra curiosidad es que Luca, en su forma de monstruo marino, tiene 3.436 escamas en su cuerpo.

MONSTRUOS MARINOS


Para crear el aspecto de los monstruos marinos, los artistas estudiaron las representaciones medievales de monstruos marinos que aparecían en la Carta Marina -un mapa renacentista que data de 1539-, así como las esculturas de monstruos marinos de toda Italia, que se ven en fuentes y bancos, e incluso en mosaicos en el suelo.

Quería que estos diseños fueran únicos, que se alejaran de sus representaciones medievales”, dice Deanna Marsigliese (directora de diseño de personajes). “Sin embargo, también quería ser fiel a sus orígenes decorativos. Se pueden ver hermosos patrones de escamas irregulares, como si estuvieran tallados a mano. Así como diferentes tipos de aletas faciales, crestas festoneadas, espinas afiladas y telarañas, y rizos en las colas. Y a medida que nuestros monstruos marinos envejecen, estos rasgos se hacen más grandes y audaces. Son criaturas hermosas, y combinadas con su iridiscencia y sus magníficos colores, podrían pasar por piezas de bisutería.”
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